Este período el jardín abre sus puertas para
recibir a la comunidad educativa, a las familias que nos acompañaran en su
recorrido por el jardín, por la primaria y por la secundaria, en la mayoría de los casos.
“Abrir las puertas” significa recibirlos con los brazos abiertos para las nuevas aventuras que transitaran sus hijos. Por esto, nos preparamos con juegos, sorpresas y muchas ganas para que cada día sea un momento de aprendizaje y alegría. Para, paulatinamente soltar la mano de mamá y papá y tomar la de la Seño.
Por esto, el jardín realiza una adaptación de horario para incorporar, día a día a los niños a las rutinas escolares sin que estas les ocasionen tristeza o angustia.
Iniciar un período escolar moviliza a la institución en su conjunto, a las familias y especialmente a los niños.
El período de iniciación:
acuerdos institucionales y áulicos
Estos incluyen:
Códigos compartidos en lo
referente al uso del lenguaje: El
niño llega muchas veces a la institución escolar con un sistema de códigos
construidos en el ámbito familiar que no siempre es conocido por las otras
personas con las que se encontrará en la escuela, referido a la nominación de
personas, objetos y situaciones. A su vez, es receptor de expresiones
lingüísticas que no siempre conoce y comprende. (¿Qué se quiere decir cuando se
dice lo que se dice?).
Es sumamente importante, que las familias que ingresan en la institución tengan una entrevista con la docente que estará a cargo de su hijo y le comenten todas las cuestiones relevantes al nacimiento, la crianza, y su desarrollo. Para poder entender cuáles son sus miedos, las actividades que más disfruta y comprender a este niño que por primera vez se acerca a un jardín. Muchas veces en esta entrevista (se realiza antes de comenzar las clases) las familias expresan miedos, inquietudes en relación a su hijo y su estadía por el jardín, que serán atendidas por el personal docente.
Códigos compartidos referidos a los modos de actuar: En el ámbito familiar hay modalidades de acción establecidas y aceptadas, las cuales no necesariamente son conocidas o aceptadas en el nuevo ámbito escolar. Viceversa: casi desde un primer momento se esperan del niño modos de actuar que pueden no serle conocidos o habituales. (¿Cómo se hace lo que se espera que se haga aquí?).
Es durante este período que se establecen acuerdos
que benefician la convivencia de los niños entre sí. Entendiendo que para
muchos es su primer espacio de socialización, donde por primera vez interactúan
con otros niños de su edad, y esto puede traer la mayor de las alegrías o
algunas asperezas. Por esto, desde el jardín se elaboran acuerdos de lo que se
puede hacer en la sala, en los patios o parques del jardín y aquellos
movimientos, formas de actuar o de responder a los niños que tenemos que evitar
para pasar un momento adecuado y alegre en el jardín.
Si la docente observará situaciones que llamasen su atención, utilizará este período para conversar con las familias e indagar sobre cómo se desempeña en el niño en su hogar. Como así también, si las familias necesitarán desasnar dudas e inquietudes el jardín es un espacio donde las puertas están abiertas para recibirlos y conversar.
Propósitos del período de inicio:
- Que el niño pueda permanecer en el jardín de
infantes durante jornada, vivenciándolo alegremente.
- Establecer vínculos entre los niños y sus docentes,
como así también entre las familias y el jardín.
- Generar en los niños actitudes de respeto y
valoración por sus pares.
-Incorporar en los niños hábitos de orden, higiene y cortesía que se mantendrán todo el año y beneficiaran el clima de aprendizaje.
- Identificar los saberes previos de los niños.
Las actividades que se realizan en este período y que apuntan prioritariamente al reconocimiento del espacio, la generación de vínculos entre los niños, la formación de hábitos, el conocimiento de los materiales básicos de trabajo, el manejo de los tiempos.
El período de iniciación hace referencia al lapso, más o menos prolongado, en el transcurso del cual el niño, los docentes y el grupo familiar construyen y adquieren un sistema de códigos compartidos, base para los sucesivos procesos pedagógicos.
¿Cómo contener (si hubiera) las primeras lagrimitas?
1. Respirar y calmarse. Los gritos y llantos de los niños son normales.
2.Te quedas con tu maestra, (nombrar su nombre) que te va a cuidar y enseñar a dibujar, pintar, etc.
3. Despedirse de los hijos y partir sin dudas.
4.Trasmitir en forma tranquila y segura que mamá o papá se va y vuelve. La frase más importante es: Me voy y volveré. Siempre voy a volver. Esta frase le calma el miedo al abandono.
5. Se van y no regresan. Los pequeños llorarán y gritarán, pues es una forma de presionar para que los padres regresen.
6. Es imposible evitar la tensión y el llanto ante la
partida, pero al tranquilizarlos e irse le dan la oportunidad de enfrentar esa
situación.
¿Qué debemos evitar hacer?
- No mostrar ambivalencia o dudas en el momento de la
despedida.
- No amenazar con frases tales como: Si no te callas, te dejo para siempre.
- No decirles: No tengas miedo, pues es normal que el niño lo sienta.
Como todo período en el crecimiento de los niños es
transitorio, requiere amor, paciencia y contención… son las primeras huellas en
sus trayectorias educativas, hagamos que las mismas estén inmersas y rodeadas
de amor y alegría.
Lic. Jesica Minutillo.
Directora
Jardín La Pluma Mágica
Ver fotos período de inicio 2020
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